Singing in a Past Life

~You're Somebody Else~
Well you look like yourself, but you're somebody else
Now you're making me nervous
You were the better part of every bit of beating heart that I had
Whatever I had, I finally sat alone
Pitch black flesh and bone, couldn't believe that you were gone

Estado: Indescriptible
Música que escucho: Labyrinth (Mondo Grosso)
Download: Shinigami Bocchan to Kuro Maid (cap4)

En TikTok, últimamente se habla mucho sobre las regresiones hipnóticas para conocer vidas pasadas. Hay muchos usuarios armando diferentes tipos de videos sobre el tema, pero un trend en particular captó especialmente mi atención: de forma breve, se escribe una dedicatoria para una persona que fue importante en nuestra vida pasada, con la canción “Lo que construimos” de Natalia Lafourcade sonando como acompañamiento ("No creas que no eres importante, al contrario, yo te amé con toda el alma...").
En YouTube, existen diversos videos creados con el fin de ayudar a los oyentes a acceder a los recuerdos de vidas pasadas. A continuación, dejo el video que vi más recomendado, para que lo prueben. Crean en ello o no, es una experiencia entretenida.

Voy a contarles los puntos más importantes de la historia que surgió en mi cabeza. Les aconsejo escuchar el video completo primero y visualizar algo ustedes mismos, así no les arruino la experiencia. Realmente me gustaría conocer sus historias, así que, los invito a contarlas en la sección de comentarios.
Al traspasar el túnel del tiempo, lo primero que me vino a la mente fueron mis pies con unos rústicos botines de cuero marrón transformándose en unos elegantes zapatos rojos. Más tarde, esto cobró sentido...

Pueblito italiano, siglo XIX. Nací mujer, fui llamada Maria Elena. Mi familia era humilde, pero tenía una casita acogedora. Vivía con mi madre, padre y hermana. Mi madre y mi hermana se parecían a las actuales, pero mi padre era muy diferente (con esto, queda claro que actualmente me gustaría que mi papá fuera distinto; quiero demasiado a mi hermana y a mi mamá como para poder imaginarme a gente diferente ocupando su lugar, sin embargo, la imagen de un total desconocido en el lugar de mi padre salió instantáneamente).
Solamente tuve un amigo, compañero de aventuras con el que pasé muchísimo tiempo en mi niñez y adolescencia (me resulta tan difícil hacer amistades y conservarlas, que por un momento me costó visualizar al menos una - este único amigo nació en honor a un par de contactos online con quienes chateo hace años; salió una especie de quimera, siempre digo que son “gemelos” porque se parecen en varios aspectos). Juntos, solíamos explorar por ahí; nos gustaba recorrer nuestro pueblo y otras áreas.

Me gustaba escribir y, principalmente, pintar. También me encantaba recorrer la zona comercial, para admirar la indumentaria que decoraba los escaparates. Había una vidriera que siempre llamaba mi atención: en exposición, había un vestido rojo y unos zapatos rojos que me fascinaban. Aquellas prendas eran costosas, pero, gracias a un dinero que conseguí vendiendo unos cuadros, pude darme el lujo de comprarlas.
Uno de mis clientes me cedió una invitación para asistir a un baile, lugar perfecto para estrenar mis nuevas adquisiciones. En ese lugar fue donde conocí al amor de mi vida, un hombre de clase alta, solitario, con cierto parecido a Tom Hiddleston (imagen influenciada por mi crush del momento, o quizás, debería decir que me gusta Tom porque me recuerda a mi antiguo amor).

Él era un médico obsesionado con la muerte, esta le aterraba porque toda su familia había perecido a temprana edad y anhelaba la inmortalidad. Ambos éramos ateos, no creíamos en un paraíso prometido. Sus investigaciones me intrigaban, era un hombre interesante. Después de algunos encuentros, me invitó a vivir en su mansión. Nos enamoramos intensamente, pero no nos casamos. No tuvimos hijos. Mascotas, cuidamos varios gatos.

Mi amado falleció bastante joven por contraer un virus mortal y fue sepultado en el cementerio familiar que se encontraba dentro de su tierra. A pesar de estar constantemente batallando contra la muerte por oficio y desear la eternidad, su destino no fue mejor que el de su estirpe.
Poco tiempo después de perderlo, tomé un tren hacia mi viejo hogar. En un trecho que me moví a pie, fui víctima de un asalto a mano armada que acabó con mi vida (se dice que tu mayor miedo está estrechamente relacionado con la muerte que tuviste en vida pasada, así que el final que se me ocurrió tiene sentido).
La verdad soy una escéptica en lo que se refiere a vidas pasadas y lo cierto es que toda esta historia surgió de forma bastante forzada, no es que las imágenes se me presentaron como una gran revelación, me esforcé por visualizar cada elemento exigido por el audio y muchas cuestiones, inevitablemente, las imaginé en función a mi vida actual. Vida pasada, no sé, pero claramente esta actividad dejó al descubierto más de un trauma, jaja…