Annabelle’s Song

~Kyoumu Densen~
Like a doll, degenerated and born
From the faintly dark coffin
My body freezes red,
My heart grows comforted by the darkness
There is another me, who loves someone so much it hurts
Now then, I wonder which one is an illusion

Estado: Preocupada...
Música que escucho: Porque te vas (Jeanette)
Download: Into the Dark (cap2x2)

Bienvenidos, mis lectores fanáticos del terror. Después de semanas y semanas de mucho trabajo, tanto en el ámbito laboral como académico, un fin de semana largo por feriado me dio tiempito para sentarme a diseñar un nuevo layout. ¡Ya era hora de un cambio de imagen! Esta vez, para decorar la cabecera edité un fanart genial de Richie x Eddie, de la artista Slumberfish [Click aquí para ver el anterior lay].
Obviamente, acompañando el cambio de lay, la principal recomendación del día es “It: Chapter Two”, producción de este año dirigida por Andrés Muschietti, basada en la novela de Stephen King. Una de las pocas películas del año a la que le di el beneficio de la pantalla grande, fui al cine a pocos días del estreno porque comía ansias. El trailer de la escena de la viejecita espeluznante fue una excelente primera probada. El primer film transcurría en el año 1989, en su secuela tenemos un gran salto temporal al 2016, recordemos que el payaso Pennywise reaparece cada 27 años para cobrar nuevas víctimas. Los niños sobrevivientes ahora son adultos, cada quien tomó un camino diferente, siguió con su vida lejos de Derry… Hasta que llega el día del reencuentro, de volver a aquel lugar lleno de recuerdos siniestros, pero también afectuosos.
Extrañaba a los perdedores, y me preguntaba si sus versiones adultas también lograrían encantarme. Puedo decir, satisfecha, que resultó ser un excelente cast; los niños y sus contrapartes adultas funcionan de una forma absolutamente fantástica. Creo que el parecido más sorprendente lo llevan Jack Dylan Grazer y James Ransone, intérpretes de Eddie Kaspbrak. Ed es un personaje que me encanta, y hasta cierto punto con el que me identifico; por su sentido del humor, porque soy asmática (que mejoró al crecer) e hipocondríaca. Jay Ryan, la versión adulta de Ben Hanscom, es un papucho, su cara parece tallada por los mismos ángeles.
Es un film interesante porque provoca sentimientos de lo más diversos, mezcla el terror con tintes cómicos y hasta románticos, el final me dejó un sabor agridulce y muchas lágrimas. Además, está el detalle de pescar los easter eggs, como encontrar a Andy Muschietti o a Stephen King en escena, o elementos característicos de la Argentina (guiños por la nacionalidad de Muschietti). No muchas películas de terror dejan una pareja favorita, ¡esta me ha dejado dos! La verdad, la mayoría de las películas del género no me dejan ni siquiera un personaje favorito, suelen centrarse más en la acción que en la caracterización de personajes. ¿Quién no ha sufrido por el amor no correspondido de Ben Hanscom?, que Beverly Marsh confundiera al autor de la carta durante tanto tiempo frustra, que él conservara la página de su anuario firmada por Bev y todos esos sentimientos durante tantos años enternece, el desarrollo de su relación enamora, su final juntos encanta. ¿Quién no ha disfrutado de la jodida química existente entre Richie Tozier y Eddie Kaspbrak? (los personajes más carismáticos de la saga, sin dudas), que Richie tuviera que esconder su deseo en el closet para evitar el bullying da rabia, que sus sentimientos por su mejor amigo perduraran durante tantos años enamora, su fatídica despedida rompe el corazón...
Vi la miniserie de 1990 cuando era muy pequeña, por lo tanto, me habían quedado muy pocos recuerdos de su historia. Después de ver la película del 2017, descargué la versión de los 90 para comparar, pero me limité a ver solo una parte. Así que la cinta del 2019 me tomó completamente por sorpresa en varios aspectos, por ejemplo, no sabía que Ben finalmente sería correspondido, ni siquiera si sobreviviría.

Cuando salí del cine y volví a casa, me puse a buscar cositas de la películas en Mercado libre. Había metido en mi lista de favoritos una remera. Oh casualidades de la vida, al día siguiente fui a Jumbo (el supermercado) y me encontré con esa misma prenda que tanto quería, me ahorré el envío por correo.

Continuando con el universo mórbido de Stephen King, la siguiente recomendación es “Pet Sematary”, producción de este año dirigida por Kevin Kölsch y Dennis Widmyer. ¿Qué harían si existieran unas tierras que devolvieran la vida a los muertos?, más precisamente, a nuestros seres queridos, mascotas e incluso familiares. Desde siempre, la humanidad ha anhelado poder vencer a la muerte, sin embargo, estas tierras no resultan precisamente la soñada medicina prometida…
Mi mayor trauma de la niñez fue Sementerio de animales de 1989, me perturbaba demasiado; cuando me la encontraba en la televisión, muchas veces dejaba la habitación un rato o directamente cambiaba de canal, porque me resultaba especialmente difícil de digerir. El remake también logró provocarme horribles sensaciones, supongo que más que nada se debe a que en principio el descenso de los personajes ocurre de formas demasiado comunes y corrientes, la muerte a secas es el monstruo de turno y eso conecta más fácilmente el portal que une a la ficción con la realidad. Se despliegan crudas reflexiones sobre la muerte, sobre su inevitabilidad, la desesperación y el misterio que le envuelven. Para colmo, cuando lo vi estaba en pleno proceso de despedirme de una de mis mascotas...
Muchas escenas de la filmación de los 80s perduraban en mi memoria con bastante nitidez (a diferencia de la película del payaso, la vi siendo un poco más grandecita y más de una vez), aún así decidí repetir aquella vieja cinta, para comparar mejor. Había leído unas cuantas críticas señalando que era muy superior al remake, que en el remake no se habían atrevido a tanto... Qué puedo decir, sorprendente lo que hace la nostalgia con la mente de la gente, la verdad es que no poseen diferencias muy sustanciales. Tienen muchísimas escenas en común, pero por algunos detalles y ciertas actuaciones, me gusta un poquito más el remake.
El film del 1989 tuvo una secuela, en 1992. Me enteré de su existencia hace poco, y decidí probarla. No me parece mala, pero la primera película está muchísimo mejor. La secuela es un tanto ridícula, no produce los mismos sentimientos de desesperación y escalofríos que la primera parte, aunque una escena en particular logró indignarme y entristecerme.

Pasemos a la última recomendación del día, “Annabelle Comes Home”, otra producción de este año, dirigida por Gary Dauberman. Hablando de películas de terror con personajes queribles, volvemos a encontrarnos con la adorable pareja de demonólogos, Ed y Lorraine Warren, acá Patrick Wilson y Vera Farmiga. La escena del inicio en la que Ed lleva a Annabelle en auto hasta su casa y va cantando con una muy “melodiosa” voz una canción de la radio, me mató (jaja). La historia se centra en la hija de estos dos, una pequeña de diez años que está aprendiendo a habituarse a las habilidades que ha heredado de su madre y a su vez a socializar en un mundo donde los otros se alejan por su “rareza”. Un día, sus padres deben hacer un viaje, y queda al cuidado de una joven niñera y una amiga de esta. Una de ellas, intrigada por descubrir si las historias de fantasmas son verdaderas, movida por la pérdida de un ser querido, romperá las reglas de la casa y liberará a las fuerzas del mal. Muchas veces los personajes de películas de terror meten la pata por razones estúpidas o meros descuidos, sin embargo, en esta cinta hay un móvil que resulta completamente comprensible.
En esta nueva entrega de la saga, disponemos de todo un museo del terror. Se explotan diferentes elementos malditos de la sagrada habitación de los Warren, no solo la muñeca endemoniada, tenemos una armadura de un sanguinario samurái, un vestido de novia que vuelve violenta a su portadora, las monedas de la parca, entre otras curiosidades por descubrir.

Mezco Toyz cuenta con una línea de muñecas creepy, las Living Dead Dolls, hace tiempo que le venía echando el ojo a más de una. Están basadas en el folclore más aterrador, en figuras históricas dementes, también en monstruos y villanos de película. En una de mis tantas búsquedas por Mercado libre, tuve la suerte de encontrar a Annabelle, por un excelente precio, obviamente no desaproveché la oportunidad de sumarla a mi colección, ¡una joyita!